De repente la puerta se abrió dando paso a una mañana fría y desapacible. El muñeco de nieve aparecía de lado, medio deshecho. La zanahoria que hacía las veces de nariz había desaparecido. El sombrero salió volando ante mis propios ojos y la bufanda roja fue arrastrada por una fuerte racha hasta mis pies… Más que un muñeco parecía un pobre espantapájaros desnudo, deforme y solitario sobre un manto de nieve, condenado su destino al vaivén de una furiosa ventisca.
©lady_p
Participación en el reto “5Líneas”. (MEDALLA DE BRONCE). Este mes de noviembre debe contener las palabras Puerta, mañana y lado.
Excelente aporte al reto5lineas, el muñeco de nieve pobrecito que solo está siempre. Un abrazo
Me gustaLe gusta a 1 persona
Muchas gracias Nuria. El pobre se quedó muy tirado…Un abrazo!
Me gustaMe gusta